Apple es una de las compañías mejor valoradas por los usuarios, es innegable que sus productos son de alto nivel y que cuidan bastante bien a los clientes. Ahora bien, también es verdad que de vez en cuando cometen fallos, y con un nuevo ejemplo de esos vengo hoy.
El caso es que dos personas poseedoras ambas de equipos Mac sufrieron problemas en sus máquinas, por lo que decidieron enviarlas al soporte técnico de Apple para que las repararan (reparaciones en teoría cubiertas por la garantía AppleCare que ambos usuarios contrataron), y aquí es donde empiezan los problemas.
Según los dos usuarios los de la manzana se negaron a arreglar los equipos, quedando anulada la garantía, debido a que estos habían estado en ambientes con humo de cigarrillo. Pero lo mejor es la razón que argumentaron los de Apple para anular las garantías y negarse a realizar las reparaciones: los equipos estaban “contaminados” por humo de cigarro, sustancia considerada riesgo biológico para los empleados.
Aunque el argumento de por sí es totalmente absurdo, lo peor es que en ninguna parte de la garantía AppleCare se indica que los equipos rodeados de humo queden excluidos de la misma.
Dicho todo esto parece ser que estamos ante dos casos completamente aislados, otros usuarios de equipos Mac no han tenido ningún problema con el servicio técnico de Apple y las garantías por ser fumadores. ¿Conocéis algún caso similar?
Aclaración: en ningún momento el servicio técnico de Apple dijo que los problemas que sufrían estos dos equipos tuviera relación directa con el humo de cigarrillos (esto no quiere decir, como ya se ha apuntado en varios comentarios, que el humo de los mismos perjudique a los equipos informáticos).
Si hubieran anulado las garantías argumentando que los equipos se habían dañado por el humo de los cigarros, el caso tendría más lógica, aunque este razonamiento seguiría siendo inaceptable ya que en ninguna parte de la garantía se indica que esta pueda ser anulada por problemas derivados del humo de cigarros.