Cuando se produce un evento en nuestra vida, el que sea, va a parar a un cajón que llamamos recuerdos. El cerebro codifica el evento a través de la alteración de las conexiones entre las neuronas. Para ello, es requisito indispensable que se "enciendan" muchos genes en las neuronas. Pues bien, los neurocientíficos del MIT han identificado lo que han denominado como el "gen maestro" que controla el proceso, la llave (gen) con la capacidad de regular en nuestro cerebro los recuerdos.

El gen que han identificado parece ser que es el que regula la capacidad del cerebro para formar nuevos recuerdos. Una investigación que ha sido publicada hace unas horas en la revista Science donde no sólo se revelan algunos de los fundamentos moleculares de la formación de la memoria, sino que se indica que los resultados también pueden ayudar a los neurocientíficos a determinar la ubicación exacta de los recuerdos en el cerebro.

El equipo de investigación ha estado dirigido por Yingxi Lin, encargada en el área de Investigación del Cerebro en el MIT.

Los estudios se centraron en el gen conocido como Npas4, cuyos estudios previos demostraron que se activa inmediatamente después de que ocurra una nueva experiencia en la actividad cerebral. No sólo eso, se había descubierto que el gen es muy activo en la estructura cerebral más crítica para la formación de recuerdos a largo plazo.

Lo que Lin y sus colegas encontraron fue que el Npas4 pasa a ser varios genes que a su vez pueden modificar el "cableado" interno del cerebro mediante conexiones entre las neuronas. Así lo explicaba:

Se trata de un gen que se conecta desde la experiencia para el cambio eventual en los circuitos.

Para ello y conseguir dar con la clave de aquellos mecanismos genéticos en la formación de la memoria, los investigadores estudiaron el aprendizaje del acondicionamiento contextual a través del miedo. Introdujeron una serie de ratones que recibían una descarga eléctrica cuando entraban en una cámara específica. A los pocos minutos los ratones aprendieron a temer a la cámara y no volvían a entrar en ella.

La investigación demostró que el Npas4 se enciende muy temprano durante este tipo de acondicionamiento. Además, se observó como la actividad del gen se presentaba en la región CA3, aquella donde es necesario el aprendizaje rápido.

No se trata de un aprendizaje específico. Creemos que el Npas4 es el disparador inicial y que a continuación se activan el resto de sistemas en el lugar correcto del cerebro.

Hasta el momento los investigadores sólo han identificado a algunos de los genes regulados por el Npas4, aunque se sospecha que pueden haber cientos de ellos. Lo que los estudios encontraron fue que el Npas4 es un factor de transcripción, es el que da las instrucciones. Los experimentos mostraron que el gen se une a ciertos sitios de activación de genes específicos y es capaz de dirigir a la enzima RNA polimerasa II que es la que empieza a copiarlos.

Les dejo con la última explicación formulada por los investigadores. Los próximos ensayos con el Npas4 irán dirigidos a la observación e identificación de todos los genes que controla:

Npas4 proporciona la señal instructiva. Sin el gen la polimerasa no sabría a donde ir, simplemente flotaría. Debemos identificar cuantos genes es capaz de controlar el Npas4, de esta forma sabremos hasta donde llega su importancia.

Estamos persiguiendo a la memoria, y creemos que podemos utilizar el Npas4 para marcarel punto exacto donde se encuentra. Ahora podemos identificar específicamente a las células en el cerebro, el lugar donde está la memoria.

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