Ahora mismo, la campaña de financiación del Ubuntu Edge está al 50 % en el tiempo, no así en su objetivo de recaudación. En quince días, 'apenas' lleva conseguidos 8,5 millones de dólares de los 32 a los que aún aspira. Tiene muy difícil conseguir su objetivo, salvo algún cambio en los perks o alguna otra estrategia de Canonical. Entre las posibilidades está que Mark Shuttleworth acabe pagando lo que por algún motivo no parecía dispuesto a pagar desde un principio, pero el clavo ardiendo al que se agarran desde Canonical es a que aparezcan nuevos financiadores para retomar los bumps iniciales... y sobre todo, que lo hagan con los valores más altos. Bloomberg ha sido el primero de ellos que ha adquirido el corporativo, de 80.000 dólares, la mayor de todas las cantidades disponibles que nadie había reclamado hasta la fecha.
Bloomberg servirá como reclamo para otras compañías
Este bundle da derecho a recibir 100 unidades del Ubuntu Edge, así como talleres empresariales y soporte técnico. Bloomberg y Ubuntu Edge inician así su andadura, pese a que el desarrollo final de este producto, viendo la evolución del proyecto, es bastante enigmático todavía. La convergencia de usos en un sólo dispositivo ha sido la razón clave para Bloomberg. Justin Erenkrantz, de Bloomberg, así lo ha expuesto: "el objetivo de Ubuntu de ofrecer en un sólo dispostivo una solución móvil de convergencia empresarial es muy interesante, complementa nuestra visión de desarrollo abierto de plataformas móviles".
La aparición de Bloomberg es un respiro para Canonical, pero necesita muchos más
La aparición de Bloomberg es una palmada en la espalda para Canonical en un momento en el que la mayor sensación en torno al Ubuntu Edge es una falta de apoyos importante. Los picos iniciales y el hype del primer momento no han sido suficientes para compensar la estaticidad de los días siguientes. Consiguió 6 millones de dólares en los primeros tres días, pero en los últimos siete a fecha de 8 de agosto, sólo 1 millón. La línea roja que marca la tendencia mínima está muy lejana, pese al aporte de Bloomberg que se ve reflejado en un pequeño salto en las últimas horas.
El buen feeling que deja entrever Shawn Edwards, director de Tecnología de Bloomberg, es una puerta a la esperanza que sirve como reclamo a otras grandes compañías: "Bloomberg apoya la innovación abierta, iniciativas como Ubuntu Edge se alinean con nuestro desarrollo de software y prioridades de negocio. Con esta inversión, los desarrolladores de Bloomberg contribuirán a una iniciativa de tecnología abierta que puede beneficiar a nuestros clientes y tener un fuerte impacto en el futuro de la informática móvil.” La relación de Bloomberg y Ubuntu Edge acaba de empezar, pero este sueño de Canonical no empezó con buen pie. Pocas veces me alegraré de haberme equivocado, pero todo tiene un aspecto negativo: Ubuntu Edge está condenado al fracaso.