Nokia Microsoft

Una de las operaciones empresariales de mayor calado vistas en este año 2013 fue, sin duda alguna, la compra de Nokia por parte de Microsoft. Con este movimiento empresarial, Microsoft se hacía con la división de dispositivos y servicios de Nokia y, por tanto, integraba en la compañía a los responsables de haber convertido Windows Phone en la tercera plataforma del mercado. Una operación de estas características no es nada simple y, además del acuerdo entre empresas, es necesario el visto bueno de los organismos encargados de evitar el fomento de monopolios empresariales. A principios de esta semana, Estados Unidos daba su visto bueno a la operación y, hoy mismo, la Comisión Europea ha hecho lo propio; por tanto, Nokia ya es parte de Microsoft.

Si bien es cierto que el anuncio de la compra se realizó en septiembre, lo que se anunció fue el acuerdo entre compañías; dicho de otra forma, la compra desde el punto de vista de dos entidades privadas. Sin embargo, la absorción de empresas de gran calado requiere que los acuerdos de fusión se sometan a estudio para evitar que, mediante la compra de empresas, se termine formando un gran monopolio que asfixie a la competencia y la destruya por completo.

En el caso de Estados Unidos, la fusión fue sometida a la revisión por parte del Departamento de Justicia y por la FTC (Federal Trade Comission) y, en Europa, ha sido la Comisión Europea la encargada de la revisión. Tanto en Europa como en Estados Unidos se ha dado luz verde a la operación de fusión porque, tras el análisis, se ha determinado que la integración de la división de dispositivos y servicios de Nokia en Microsoft no afecta a la competencia.

El informe de la Comisión Europea, en mi opinión, es más que interesante porque perfila algunos matices sobre los planes de Microsoft con respecto al segmento de la movilidad:

En un sentido amplio, Nokia y Microsoft son compañías complementarias. Nokia se ha encargado del hardware y Microsoft ha sido la proveedora de la plataforma que Nokia ha integrado en sus dispositivos Lumia; por tanto, aunque se solapan en algunos detalles (recordemos que Nokia "compite" también con Asha), este solape no es una amenaza para la fusión.

La fusión y, por tanto, la integración de una división pura de smartphones en la compañía no significa que Microsoft cierre Windows Phone a otros fabricantes. Este detalle creo que es muy importante puesto que Microsoft podría, perfectamente, controlar el ciclo completo de producto y dejar de lado a otros fabricantes que integran Windows Phone pero, realmente, no es algo que a día de hoy le convenga y tampoco le supone una gran amenaza con lo bien que ha funcionado la gama Lumia en el mercado.

  • Microsoft no va a restringir sus servicios para dejarlos en exclusiva en Windows Phone. Dicho de otra forma, Skype o SkyDrive siguen siendo servicios multiplataforma y esto es un aspecto importante para darle luz verde a la fusión. De hecho, en el segmento empresarial ocurre algo parecido porque la Comisión Europea ha hecho énfasis en Microsoft Exchange y el soporte multiplataforma (por considerarse un sistema ampliamente usado en el segmento empresarial).

Si bien hay luz verde a la fusión entre empresas (y, por tanto a la operación de compra de Nokia), la Comisión apunta a que seguirán vigilando la evolución de la compañía resultante y sus prácticas para velar que no acaban dando un "golpe de timón" que perjudique la libre competencia.

¿Y ahora qué? ¿Qué podemos esperar de la fusión de Nokia y Microsoft? Stephen Elop, evidentemente, va a ser pieza clave de esta integración y sobre el antiguo CEO de Nokia recaerá la división de dispositivos que, además de los smartphones, abrazará Surface y el hardware de Xbox; una potente división de hardware que se va a encargar de tres de los productos estrella de Microsoft.

¿Qué pasa entonces con la candidatura de Elop como CEO de Microsoft? Si echamos la vista atrás y tomamos como referencia la adquisición de Skype, Tony Bates (CEO de Skype) se transformó en el vicepresidente de la división de Skype y, tras la reorganización, se ha hecho cargo de desarrollo de negocio. Por tanto, Elop, seguramente, quede en el segundo nivel de dirección con una de las divisiones, en mi opinión, más prometedoras del nuevo ciclo de Microsoft.

Recibe cada mañana nuestra newsletter. Una guía para entender lo que importa en relación con la tecnología, la ciencia y la cultura digital.

Procesando...
¡Listo! Ya estás suscrito

También en Hipertextual: