Nintendo está pasando por una época delicada. El impulso imparable obtenido hace unos años y su franquicia irremplazable hicieron que la compañía siguiese su curso con un balance positivo. Acaban de publicar los resultados de ventas y económicos del último año, los cuales plantean muchos interrogantes.
A pesar de haber ganado 10.100 millones de yenes (unos 72 millones de euros) entre abril y diciembre del 2013, esto representa un 30% menos de beneficios que el año anterior. En los primeros nueve meses del año fiscal, la compañía registró unas ventas con un valor de 499.000 millones de yenes (unos 3.500 millones de euros), significando un 8% menos que en el ejercicio anterior.
Unidades vendidas
En comparación con la salud que presenta la 3DS, durante esos últimos 9 meses la Wii U ha conseguido vender 2,41 millones de unidades, poniéndose como meta vender 2,8 millones al finalizar el año (tras haber borrado de su mente la idea inicia de vender 9 millones de unidades). En su comunicado acusan a la Wii U de causar estragos en los beneficios de la compañía:
La Wii U sigue teniendo un impacto negativo en los beneficios de Nintendo, debido principalmente a su reducción de precio en los Estados Unidos y Europa. En cuanto a las ventas de software, aunque hay altos márgenes de beneficio, no crecieron lo suficiente.
Por si esto fuera poco, Nintendo espera terminar el ejercicio del 2013 con una pérdida de 25.000 millones de yenes (unos 177 millones de euros), situación que sólo ocurrió en el 2011. Como vemos, aunque la compañía "está sentada" sobre una gran pila de dinero, parecen ir cuesta abajo y sin frenos. Las decisiones que tomen a partir de ahora serán cruciales para su supervivencia.
Muchos usuarios piden a gritos a Nintendo que desarrolle juegos para otras plataformas (smartphones, tablets, etc.), uno de los chalecos salvavidas que le quedarían a la compañía. Desgraciadamente, la compañía ha desmentido los rumores que apuntaban que estarían creando juegos para dispositivos móviles, lo que indica que sus planes irían por un camino distinto.