Si te decimos el nombre David John Moore Cornwell, antiguo espía del MI5 y MI6, quizás no te suene demasiado, pero si ya te decimos John le Carré, el seudónimo que adoptó Cornwell, quizás te suene más. Al igual que Ian Fleming, John le Carré alternó su carrera de espía con la escritura de diversas novelas, aunque personalmente prefiero el enfoque de Le Carré debido al aura de realidad que rodea a George Smiley, uno de los personajes que podemos encontrar en sus novelas y el cual, a diferencia del Bond de Ian Fleming, no es irresistible para las mujeres (de hecho, su esposa le pone los cuernos), no tiene estilo a la hora de elegir ropa y conduce un viejo Ford Anglia en lugar de un Aston Martin. Por eso, si te gustan las novelas de espías, os dejamos aquí un recopilatorio con las mejores novelas de John le Carré, considerado por muchos uno de los mayores expertos del suspense y espionaje.

El espía que surgió del frío

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A pesar de ser únicamente su tercera novela por aquel entonces, con El espía que surgió del frío John le Carré se ganó el reconocimiento internacional (teniendo en cuenta que todavía era un espía británico) y consigue plasmar una imagen que lo ha convertido en uno de los libros de referencia en la temática del espionaje. Le Carré consigue plasmar lo que hemos mencionado anteriormente, un espía alejado de todo el glamour y efectividad de espías como James Bond o el posterior Jason Bourne (que llegaría en 1980). En lugar de un héroe que salva el mundo durante el día y tiene tiempo para tener un traje impecable y un espectacular coche, nos encontramos con Alec Leamas.

Leamas es un espía británico y antiguo responsable del espionaje inglés en Alemania Oriental y el cual, tras haber sido asesinados o detenidos todos sus informadores y agentes, tiene una cuenta casi personal que saldar con sus viejos rivales. Sin embargo Control, el jefe del MI6, le solicita volver a Londres para una nueva misión. Una misión en la que deberá introducirse en un mundo de clandestinidad y fuera de los registros para conseguir cambiar la lealtad de un alto cargo de Alemania del Este, lo cual le llevara a una espiral de violencia, lealtades cambiadas y un replanteamiento de sus ideales. En resumen, una novela que no tiene desperdicio y que debes leer ya si eres un fan de esta temática.

La chica del tambor

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Una de las cosas que desgraciadamente caracteriza al mundo de la narrativa del espionaje es la cierta misoginia en torno al mismo. Los protagonistas, ya sean fracasados sociales o héroes mujeriegos, son en la mayoría de los casos hombres. John le Carré quiso aportar su granito de arena en arreglar esta desigualdad con La chica del tambor. En esta novela, le Carré se centra en el escenario mundial que hubo tras los atentados de los Juegos Olímpicos de Munich de 1972, en el que 11 participantes olímpicos israelíes y un policía alemán murieron durante un secuestro por el grupo Septiembre Negro, y por el que posteriormente los israelíes se vengaron.

Con este escenario mundial es dónde comienza la ficción situada en 1983 de la mano de le Carré mediante Martin Kurtz, el jefe de los servicios de inteligencia de Israel que, en plan arriesgado para cazar y asesinar a Khalil, un terrorista palestino que ha matado en diversos atentados a ciudadanos de religión judía, recluta a una actriz británica de la izquierda radical llamada Charlie para encontrarlo y matarlo. Así, Charlie recibirá un intensivo entrenamiento para convertirse en una agente doble que trabaje para los israelíes, e iremos viendo en la novela un proceso de desgaste mental en la protagonista relacionado con el dilema moral de quitar una vida, muy parecido a lo que vimos en la película Munich, de Steven Spielberg.

El topo

Siempre suele haber un personaje con el que se identifique a un escritor: para Tom Clancy es Jack Ryan, para Ian Fleming es James Bond, para Robert Ludlum es Jason Bourne, y para John le Carré es George Smiley. Sin embargo, la vida del espía de le Carré es, en cierto modo, más deprimente. Sí, es tremendamente bueno en su trabajo y temido por sus enemigos, pero fuera del trabajo es una persona cualquiera, con problemas de la vida real como una esposa que le es infiel, una capacidad nula de combinarse correctamente la ropa y con una mala forma física, por lo que en sus interrogatorios usa elementos psicológicos en lugar de la violencia para encontrar la verdad que está buscando.

Fuente." width="800" height="600" class="size-large wp-image-266316" /> En el 2011 se realizó una adaptación a la novela en una película protagonizada por Gary Oldman. Fuente.

En El topo vemos el ocaso de la carrera de Smiley durante los años 70 y el cual, tras haberlo forzado a retirarse anticipadamente debido al fracaso de una misión especial en Hungría, le solicitan volver para una misión especial. Dicha misión consiste en la sospecha de un agente doble, un topo, en la cúpula de The Circus (como es conocido el servicio de inteligencia británico). Debido al escándalo interno que podría llegar a generarse sólo alguien externo puede averiguar quién es y, con la ayuda de otro antiguo agente y otro actualmente en activo, Smiley deberá ir recabando información y encajando las piezas para intentar descubrir al traidor.

Un espía perfecto

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Antes hablábamos de la humanización a la que le Carré sometía a sus personajes, y en Un espía perfecto encontramos un claro ejemplo de ello, en el que podemos ver cómo la vida de espía y padre de familia colapsan, así como las consecuencias de esta doble vida, y las razones políticas y sociales de comenzar a ser espía en primer lugar. La historia se centrará en Magnus Pym, distinguido agente de los servicios secretos británicos que, harto de una vida de mentiras, riesgos innecesarios y en la que llega al límite de su resistencia, desaparece sin contactar con nadie, ni siquiera con su esposa Mary. Es aquí cuando se inicia una carrera contrarreloj en la que Jack Brotherhood, jefe y amigo de Pym durante más de treinta años, inicia inmediatamente una búsqueda fuera de los canales oficiales con el fin de poder salvar a Magnus antes de que su huida sea descubierta.

Mientras, un espía norteamericano, también antiguo amigo de Pym, trata a su vez de capturar al espía británico para obtener un ansiado ascenso. Y mientras Pym, que ha dividido su tiempo entre su hogar en Viena y una modesta casa situada en la costa de Inglaterra, donde va con el nombre falso, se esconderá en esa modesta casta y escribirá una larga carta a su hijo Tom, contándole diversos acontecimientos de su vida, a fin de hacerle comprender las razones que motivaron su conducta, siendo plenamente consciente de que está en búsqueda y captura ya que si dejas de ser un espía, pasas a convertirte en un traidor despreciable al que hay que cazar, porque sólo puede ser perfecto el espía atrapado, retirado o muerto.

El infiltrado

"TheNightManager" by http://www.fantasticfiction.co.uk/edition/?isbn=0340592818. Licensed under Fair use of copyrighted material in the context of The Night Manager via Wikipedia - http://en.wikipedia.org/wiki/File:TheNightManager.jpg#mediaviewer/File:TheNightManager.jpg
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Los tiempos cambian, así como las historias. Tras el final de la Guerra Fría, la principal línea de argumento de las novelas de le Carré se había terminado, por lo que el prolífico escritor tuvo que buscar otras historias que contar. El infiltrado fue la primera novela post-Guerra Fría que escribió le Carré, en la que cuenta la historia de Jonathan Pine, un antiguo soldado británico convertido a recepcionista nocturno en un hotel (La novela en inglés es The Night Manager, el título que ostenta Pine en dicho hotel). Pine se ve involucrado por diversas circunstancias en una trama colaborando con el MI6 para atrapar a Richard Onslow Roper, un traficante internacional de armas.

Esta misión le llevará por diversas partes del mundo trabajando solo y en la que deberá ganarse el favor de traficantes menores para ir haciéndose un nombre en el mercado negro y así intentar llegar a una isla del Caribe la cual es la base de operaciones de Roper. Lo verdaderamente interesante de esta novela es la capacidad de adaptación de le Carré, ya no solamente en crear a un George Smiley de nueva generación, sino el cambio de enfoque al pasar de rivalidades entre superpotencias, a luchar con criminales apátridos y con pocas lealtades. Al igual que las otras novelas de le Carré, El infiltrado no decepciona y los flashbacks de Pine simbolizan claramente dicho cambio entre estos dos mundos, el de la Guerra Fría y el mundo que quedó tras el derribo del Muro de Berlín.

Por supuesto, hay otras muchas novelas de John le Carré que no he tenido en consideración, como El sastre de Panamá, Una verdad delicada, El jardinero fiel o El hombre más buscado y muchas más. Y tú, ¿tienes alguna novela favorita de Le Carré?

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